Recientemente en la ciudad de Bogotá se han presentado una serie de eventos donde los trabajadores del servicio tradicional de taxistas han optado por medidas de corte violento contra los vehículos que prestan el mismo tipo de servicio, por medio de la Aplicación Móvil―APP llamada “UBER”.

Si bien esto es nuevo en Colombia, no lo es en Europa y Estados Unidos, ciudades donde lleva más tiempo en servicio la Aplicación. Hace varios meses, a mediados del mes Julio del presente año, quedó sentado un precedente que indica la fuerza que ha tomado la marca. El alcalde de Nueva York, Bill de Blasio, intentó poner controles al volumen de operaciones de UBER, pero le tocó retroceder en sus medidas, a causa de una fuerte campaña en redes que iban desde anuncios de página entera en el New York Times, hasta apoyo de celebridades como Kate Upon, Neil Patrick Harris y Ashton Kutcher que inundaron las redes sociales con hashtags en apoyo a la aplicación. Si miramos con detenimiento, nos daremos cuenta de que es natural que la aplicación encontrara una gran masa de defensores en la red, ya que esta nace y presta su servicio a través de la misma y además, está en consonancia con las necesidades de mejorar el servicio que tanto clama la gente.

Como vemos, esto representa un problema para la forma tradicional que había predominado en el negocio del transporte… y parece ser que UBER es la manzana de la discordia; pero para hacernos una idea más amplia al respecto, es preciso conocer un poco más a fondo el funcionamiento de esta.

¿Qué es la Aplicación Móvil―APP UBER y cómo funciona?

UBER es una empresa que trabaja a través de una Aplicación Móvil―APP, fundada por Garret Camp y Travis Kalanick. Con un capital semilla desarrollaron la aplicación y empezaron a operar con 30 automóviles en la ciudad de San Francisco a inicios del 2009; presentando en pocos años un crecimiento vertiginoso que se ha expandido a más de 240 ciudades en más de 50 países diferentes.

El funcionamiento es sencillo. Los usuarios pueden descargar la Aplicación Móvil―APP de UBER desde su Android y Smartphones, luego activan un mecanismo de localización y solicitan el servicio de transporte que es a grandes rasgos, monitoreable y seguro; y en ciertas ocasiones un poco más costoso que un taxi tradicional, pero eso sólo depende del tipo de automóvil elegido para el servicio.

La aplicación es gratuita y el cobro se realiza dependiendo el país, de acuerdo al recorrido por Kilómetro, por minuto y otro tanto por concepto de servicio. Del costo total del mismo un 80 % va para el transportador y el 20 % para la aplicación.

La Polémica

Lo novedoso es que UBER ha hecho saltar en pedazos las formas existentes en cuanto al servicio de transporte, lo que ha significado una fuerte competencia a los transportadores tradicionales; y más si tenemos en cuenta que en el mundo de hoy, la elección de un servicio u otro depende exclusivamente de las ventajas, garantías y de la seguridad que me inspira.

En ese sentido UBER se presenta como la novedad. Hace un énfasis en el servicio personalizado, y en su propuesta de Marketing Digital resalta la importancia de la seguridad, realizando procesos de investigación de antecedentes a los prestadores de servicios ligados a su marca, cuestión que no pasa desapercibida en un mundo donde cada vez nos sentimos más inseguros. A esto hay que sumar que la flotilla de vehículos tiene menos de 5 años de antigüedad, que son monitoreables y que además, te evitan cargar efectivo porque el pago se hace con tarjeta.

Estos elementos tecnológicos introducidos por UBER, queramos o no, están redinamizando constantemente las lógicas de negocio, hasta el punto de llevar a los taxistas tradicionales a entrar en la onda de las Aplicaciones Móviles―APP tipo EasyTaxi, Tapsy, MyTaxi, By―Taxi etc.

La tecnología sigue avanzando día a día haciendo que todos los negocios existentes deban replantearse la forma en cómo prestan sus servicios, llevando en la mayoría de los casos a implementar cambios siempre en la línea de satisfacer al cliente o usuario, porque es en últimas quien decide qué y cómo consumir algún servicio. No es raro entonces bajo esta lógica que muchos favorezcan con su opinión a servicios como UBER, que representan una suerte de innovación que atiende las necesidades planteadas por los mismos usuarios.

La tecnología llegó para quedarse, eso es una gran verdad; y las polémicas manifestaciones que hemos visto por estos días en la ciudad de Bogotá, son sólo la punta del iceberg, respecto a las dimensiones que ha adoptado esta misma situación en EE UU y Europa.

La tecnología y en este caso concreto las Aplicaciones Móviles―APP, han aparecido con la idea de facilitar los procesos que los mismos usuarios demandan, lo cual amerita reconfigurar nuevas formas para relacionarse y prestar servicios, atendiendo con más seriedad a las necesidades que expresa a gritos nuestro usuario potencial.

Sin importar cuál sea nuestra posición al respecto de esta polémica, es un hecho que los tiempos están cambiando y estas discusiones que en ocasiones quisiéramos evitar son imposibles de pasar por alto.

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