Empezamos con un simple correo gratuito y terminamos con sendas identidades corporativas y mucho más información diseminada en la red de la que calculamos.
Hemos llegado a convertirnos en piñones de la red, que empezamos dando un “me gusta” en Facebook antes de ir a cepillarnos los dientes.
Siendo la identidad digital toda una revolución de la información: emisión, trasferencia y recibo; como no imaginar en que se presentarían actitudes nocivas.
Podemos aprovechar las ventajas de una presencia en línea eficazmente gestionada, frente a las principales dificultades que provengan de una identidad no homogénea. Y para gestionar la identidad digital hábilmente, tendremos que contemplar con detalle los asuntos relativos a la seguridad en Internet.
Gestionar la identidad virtual no es algo pasajero o meramente instrumental, está relacionado con un aprendizaje, una introducción en la cultura digital en la cual el ciudadano ya se encuentra socialmente.
“Identidad digital es todo lo que identifica a un individuo o marca en el entorno web”
Desde el siglo pasado, se está viendo una revolución tecnológica universal, que ha dado paso a una sociedad informacional, enmarcada en la creación, gestión y uso de información. Esto gira en torno a las tecnologías de la comunicación y el procesamiento de los datos, presentes en la mayoría de los ámbitos de nuestra vida.
La cantidad de información que una persona genera, gestiona, edita y comparte diariamente, es incalculable.
Estadísticas de uso en Colombia
Gracias al raudo avance de los componentes y programas del famoso Plan Vive Digital, el año 2013 fue un año histórico que permitió la consolidación de las TIC en el país. Colombia pasó de tener 3 operadores de telecomunicaciones en plataformas 3G a 6 operadores con 4G. El país se posicionó durante el año 2013 como la segunda nación latinoamericana en Gobierno Electrónico. En la actualidad y a través deGobierno en línea, se pueden realizar más de 1.000 trámites y servicios a través de medios electrónicos.
Las estadísticas nos muestran un crecimiento inusitado y la seguridad tiene que convertirse en una prioridad para empresas y personas; pues los delitos digitales también se multiplican día a día.
Verificación y suplantación de identidad
Ante la abundancia de información y la sobreexposición, el internauta puede quedar desprotegido en un momento dado. Estar en Internet significa poseer una identidad digital, que irá construyéndose poco a poco a partir de tu propia actividad digital y la de los demás, pero cada vez es más necesario aumentar el tacto y dar pasos hacia la conciencia de la inseguridad en Internet.
La amplia oferta actual de ocio/negocio y consumo nos invita a un uso desmedido, agitado y veloz… hasta que nos sucede lo impensado y nos visita el “infortunio digital”. Phishing, perdida de datos, publicaciones indeseadas y mala reputación, pérdida de cuentas, información y dinero.
El hecho de manejar cuentas personales o corporativas con servidores gratuitos (hotmail, gmail, yahoo, msn, aol, entre otros) puede ser una manera de facilitar la suplantación de identidad (phishing). Proceso por el cual, haciéndose pasar por ti, recogen información confidencial, por ejemplo contraseñas y números de cuentas.
Ejemplo de phishing: Tienes un correo tipo pepitoperez@hotmail.com y un delincuente puede enviar una comunicación en tu nombre desde otro correo llamado pepito.perez@hotmail.com o incluso pepitoperez@gmail.com.
Pero bien, no profundizaremos en el nivel o los tipos de riesgos ni en las técnicas, la finalidad del artículo es crear conciencia sobre la factibilidad de realizar acciones inseguras y la posibilidad de establecer medidas a nivel personal o corporativopara minimizar los riesgos.
¿Alguna vez te ha llegado un correo diciéndote que es del banco y necesitan comprobar tu cuenta? Ó, que “Se ha hecho acreedor a un premio, por favor envíe sus datos“.
Aunque existen las leyes que castigan está práctica engañosa, por Internet es tan fácil conectarse como perderse de vista. Máscaras de ip´s y aplicaciones que realizan envíos fantasmas de comunicados se ven a diario en los buzones. Lo único que al parecer nos salva milagrosamente es la intuición, pero, ¿hasta cuándo será esto suficiente?
Son pocos los usuarios que disponen de suficiente información al respecto. Para las empresas, identidades digitales basadas en páginas web con dominio propio y correos corporativos sobre estos dominios, es lo mínimo que deben optar.
Realizar backup de sus datos, establecer relación directa y constante con los clientes, configurar códigos captcha en las casillas de contacto, ayudarán a preservar tu información y permitirán que tu nombre se muestre con una reputación de marca.
Lo importante no es saber, sino conocer al que sabe.
¿Conoces Intuitiva?